"listen before i go" es una canción interpretada por Billie Eilish, incluida en su álbum "WHEN WE ALL FALL ASLEEP, WHERE DO WE GO?". Esta pista fue lanzada en 2019 y pertenece al género de pop alternativo. La letra de la canción ofrece un vistazo íntimo a las emociones complejas y turbulentas de la cantante.
La canción comienza con la petición de ser llevado al techo para ver el mundo una vez que haya dejado de respirar, una imagen intensa que sugiere un deseo de escapar o liberarse de algún tipo de dolor o situación insostenible. La idea de ver el mundo mientras se convierte en azul evoca una sensación desgarradora y final. La protagonista también hace referencia a querer creer que el amor es infinito, pero se enfrenta a la realidad del abandono y la insinceridad en sus relaciones.
A lo largo de la canción, Billie expresa su agotamiento emocional y físico, haciendo alusión a dolores físicos como las lágrimas saladas en sus mejillas causadas por dolores de cabeza constantes. La sensación de estar dispersa y no sentirse bien se transmite claramente en las líneas. Además, destaca la frase "Don't say I'm all that matters", sugiriendo que no quiere ser vista como el centro del universo para alguien más.
El estribillo reitera constantemente las disculpas (Sorry) como si buscara redención o perdón por algo desconocido. Sin embargo, la protagonista reconoce que no hay salida fácil ni manera rápida de resolver sus problemas, lo cual se ilustra con la repetición del concepto "But down". Esta línea puede interpretarse como descendiendo hacia un abismo emocional o aceptando desafíos difíciles en lugar de evitarlos.
En el puente final, Billie reflexiona sobre sus seres queridos y les expresa su amor y aprecio antes de tomar una decisión definitiva. A pesar del tono melancólico y sombrío de la canción, hay un matiz sutil de perseverancia e independencia en las palabras finales: "But I'm not sorry", sugiriendo un acto consciente y definitivo por parte del personaje principal.
En resumen, "listen before i go" es una exploración lírica profunda sobre el dolor emocional, los desafíos personales y la lucha interna por aceptar circunstancias difíciles. Billie Eilish logra transmitir vulnerabilidad y fuerza a través de esta potente balada pop alternativa que invita a los oyentes a reflexionar sobre temas universales como el amor, la pérdida y la autenticidad emocional.